La crisis económica ha dejado sentir sus estragos al elevar la desigualdad en la distribución de la riqueza del país, y lo que se pudo lograr anteriormente a través de programas sociales en beneficio de las mayorías, a través de los recursos públicos, se evaporó en estos dos últimos años de la administración de Felipe Calderón, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo a los resultados de la Encuesta de Ingreso Gasto, la pobreza se elevó en las familias que menos ingresos tienen: El 60% de los hogares más pobres fue en conjunto de 26.7%, lo que representó una baja de 3.6% en la distribución del ingreso total, comparado con la participación que tuvieron en 2006.
Contrario a lo anterior, el 10% de los hogares con los ingresos más altos concentra el 36.3% de los ingresos nacionales, lo que significó un aumento de 0.6 puntos porcentuales, en dos años.
Cabe resaltar que México de por sí no ha resuelto adecuadamente el mecanismo de distribución de riqueza, en este periodo de crisis la desigualdad se incrementó.
Los datos del INEGI subrayan que en el periodo 2006-2008 los hogares más pobres de nuestra sociedad fueron los más afectados, pues vieron una caída de 8% en su ingreso promedio trimestral al pasar de 6,651 pesos en 2006, a 6,116 pesos en 2008, mientras que los hogares más ricos prácticamente mantuvieron su ingreso en 133,048 pesos.
Del total de ingresos que reciben los hogares, 80.1% es monetario y 19.9% no monetario.
Los datos detallan que la gente destina para su alimentación el 33.6% del gasto y las personas con mayores recursos mantienen su poder de compra.
De acuerdo a los resultados de la Encuesta de Ingreso Gasto, la pobreza se elevó en las familias que menos ingresos tienen: El 60% de los hogares más pobres fue en conjunto de 26.7%, lo que representó una baja de 3.6% en la distribución del ingreso total, comparado con la participación que tuvieron en 2006.
Contrario a lo anterior, el 10% de los hogares con los ingresos más altos concentra el 36.3% de los ingresos nacionales, lo que significó un aumento de 0.6 puntos porcentuales, en dos años.
Cabe resaltar que México de por sí no ha resuelto adecuadamente el mecanismo de distribución de riqueza, en este periodo de crisis la desigualdad se incrementó.
Los datos del INEGI subrayan que en el periodo 2006-2008 los hogares más pobres de nuestra sociedad fueron los más afectados, pues vieron una caída de 8% en su ingreso promedio trimestral al pasar de 6,651 pesos en 2006, a 6,116 pesos en 2008, mientras que los hogares más ricos prácticamente mantuvieron su ingreso en 133,048 pesos.
Del total de ingresos que reciben los hogares, 80.1% es monetario y 19.9% no monetario.
Los datos detallan que la gente destina para su alimentación el 33.6% del gasto y las personas con mayores recursos mantienen su poder de compra.
fuente- SDP noticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario