jueves, 9 de julio de 2009

Curas de México y EU exigen a Calderón y Obama esclarecer el caso Brad Will


Curas de México y EU exigen a Calderón y Obama esclarecer el caso Brad Will
PEDRO MATíAS
OAXACA, Oax., 9 de julio (apro).- Un grupo de 165 sacerdotes mexicanos y estadunidenses deploró la captura de Juan Manuel Martínez, acusado del asesinato del periodista Brad Will, y consideró que esa acción sólo busca apresurar la aplicación de fondos del Plan Mérida".

En una carta dirigida a los presidentes de México y Estados Unidos, Felipe Calderón y Barack Obama, los curas insisten en que los gobiernos atiendan las demandas de justicia de la familia de Brad Will, asesinado el 27 de octubre de 2006 durante los disturbios de 2006 en la ciudad de Oaxaca.

Además, piden se tomen en cuenta las recomendaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y de organismos internacionales, que desechan las hipótesis del gobierno de Ulises Ruiz Ortiz y de la Procuraduría General de la República (PGR).

Los 84 religiosos de Estados Unidos y 81 de México solicitan a Calderón y Obama tomen nota de las "violaciones a los derechos humanos cometidos en contra de Juan Manuel Martínez".

En el texto insisten en que ambos presidentes "hagan causa común en este caso"; de lo contrario, advierten, harán de Martínez Moreno una victima de expiación de un crimen que no cometió.

Los presbíteros, pastores, religiosas y religiosos manifestaron así su preocupación sobre el esclarecimiento del homicidio de Will, quien el 27 de octubre de 2006 filmaba para la agencia noticiosa Indymedia una marcha del movimiento popular-magisterial, que en entonces se dirigía al municipio de Santa Lucía del Camino, muy cercano a la ciudad de Oaxaca.

En el transcurso de la manifestación se desató la violencia entre algunos seguidores de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y grupos formados por funcionarios públicos y simpatizantes del PRI.
En medio de los incidentes Bradley fue herido con arma de fuego y poco después murió. Los religiosos recordaron que los primeros indicios apuntaban que el crimen había sido cometido por Abel Zárate, regidor del municipio de Santa Lucía, así como por el uniformado Oswaldo Manuel Aguilar Coello, ambos con fuertes vínculos con el Partido Revolucionario Institucional (PRI).

En noviembre de 2006, ambos fueron detenidos y consignados, y aunque el juez mixto de primera instancia del distrito de Etla les dictó formal prisión, semanas después fueron puestos en libertad.
Posteriormente la PGR atrajo el caso y, para sorpresa de muchos, dio por buena la hipótesis formulada por la entonces procuradora estatal, Lizbeth Caña Cadeza, quien aseguró que el periodista fue baleado por miembros de la APPO.

Como el viraje en la investigación fue tan notorio, en septiembre de 2008 la CNDH emitió una recomendación en la cual descalificaba la indagatoria.En octubre de 2008, el panadero Juan Manuel Martínez, originario de la ciudad de Oaxaca, fue detenido y condenado a prisión como responsable del homicidio del periodista estadunidense."Juan Manuel no es responsable del crimen que se le imputa. Y a lo largo del proceso judicial se encuentran muchas y graves irregularidades que hacen del mismo un caso injusto e ilegal. Aún más, Juan Manuel, su familia y sus abogados han sido objeto de presiones e intimidaciones diversas", acusa el documento.

Y aunque Martínez Moreno no aparece en las grabaciones del homicidio de Brad Will, el juez de la causa le dictó formal prisión.Los sacerdotes señalan que, "en un contexto más amplio, es necesario y muy significativo recordar que los más de 23 homicidios ocurridos en el conflicto social oaxaqueño iniciado en el 2006 permanecen en la absoluta impunidad, y obviamente no hay detenidos, solamente, de manera sorprendente, Juan Manuel Martínez. Más aún, todos los asesinados durante el conflicto político son oaxaqueños, a excepción de Bradley Roland Will".

fuente- proceso

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