Ni la burla perdona Ciro Gómez Leyva, columnista de Mileno y locutor de Radio Fórmula.
Narra en su columna de este lunes: "Ayer en la tarde fui a una farmacia de Coyoacán. En la cola de la caja noté que dos tipos de unos 25, 30 años y una mujer poco más joven me miraban y secreteaban. Camino al estacionamiento, se me acercaron a un par de metros. Uno espetó: "¡Ciro, hay que estar con Obrador, cabrón!". Sonreí, subí al auto, salí y ahí seguían. Uno traía un refresco de manzana en la mano. Frené. Fintó que iba a golpear la ventanilla. Nos mentamos la madre, pero ni él, ni yo, ni el otro ni la mujer nos atrevimos a ir más allá".
Gómez Leyva admite que él mentó la madre a un ciudadano que, simplemente, lo cuestionó por su lamentable papel como informador.
Dice que lo hizo después de que los otros "fintaron" con golpear la ventanilla de su carro.
Para estar seguros de lo que pasó habría que escuchar la versión de los ciudadanos que le reclamaron que diga tantas mentiras, con tanta frecuencia, acerca de López Obrador.
Lo único que es cierto es que Ciro confiesa que mentó la madre a un ciudadano que no es figura pública, algo que por cierto Ciro sí es: "Nos mentamos la madre, pero ni él, ni yo, ni el otro ni la mujer nos atrevimos a ir más allá".
¿Es periodista que un periodista cercano a Felipe Calderón y a muchos otros políticos poderosos (habla con frecuencia con Manlio Fabio Beltrones, Fernando Gómez Mont, Jesús Ortega, etcétera) se ponga a mentarse la madre con ciudadanos comunes y corrientes a los que no les gusta su tarea informativa?
Al contar el incidente, Ciro ofende a los seguidores de Andrés Manuel: "Las valientes juventudes legítimas a las que el líder acaba de dar cuerda".
Y según Ciro, calumniando otra vez, la culpa de que la gente lo cuestione en la calle la tiene AMLO: "Me había propuesto dejar pasar el enésimo insulto, la enésima calumnia de López Obrador, que el jueves afirmó, así porque sí, que yo le hago funciones de ‘achichincle' a la ‘mafia'. Befa ganada por criticar su miserable teatro de Iztapalapa, por cuestionarlo a él y a su pueblo bueno".
Desde luego, aunque lo niegue, para muchas personas Ciro Gómez Leyva es un achichincle de la mafia política. Si no lo fuera, no calumniaría cada estrategia de resistencia propuesta por AMLO: "Miserable teatro de Iztapalapa".
Después de afirmar eso, Ciro Gómez anuncia que va a combatir a López Obrador. ¿Más todavía? El columnista de Milenio dice: "¿Por qué un político profesional que se financia con recursos públicos puede calumniar con esa levedad a un periodista y salir impune?".
Narra en su columna de este lunes: "Ayer en la tarde fui a una farmacia de Coyoacán. En la cola de la caja noté que dos tipos de unos 25, 30 años y una mujer poco más joven me miraban y secreteaban. Camino al estacionamiento, se me acercaron a un par de metros. Uno espetó: "¡Ciro, hay que estar con Obrador, cabrón!". Sonreí, subí al auto, salí y ahí seguían. Uno traía un refresco de manzana en la mano. Frené. Fintó que iba a golpear la ventanilla. Nos mentamos la madre, pero ni él, ni yo, ni el otro ni la mujer nos atrevimos a ir más allá".
Gómez Leyva admite que él mentó la madre a un ciudadano que, simplemente, lo cuestionó por su lamentable papel como informador.
Dice que lo hizo después de que los otros "fintaron" con golpear la ventanilla de su carro.
Para estar seguros de lo que pasó habría que escuchar la versión de los ciudadanos que le reclamaron que diga tantas mentiras, con tanta frecuencia, acerca de López Obrador.
Lo único que es cierto es que Ciro confiesa que mentó la madre a un ciudadano que no es figura pública, algo que por cierto Ciro sí es: "Nos mentamos la madre, pero ni él, ni yo, ni el otro ni la mujer nos atrevimos a ir más allá".
¿Es periodista que un periodista cercano a Felipe Calderón y a muchos otros políticos poderosos (habla con frecuencia con Manlio Fabio Beltrones, Fernando Gómez Mont, Jesús Ortega, etcétera) se ponga a mentarse la madre con ciudadanos comunes y corrientes a los que no les gusta su tarea informativa?
Al contar el incidente, Ciro ofende a los seguidores de Andrés Manuel: "Las valientes juventudes legítimas a las que el líder acaba de dar cuerda".
Y según Ciro, calumniando otra vez, la culpa de que la gente lo cuestione en la calle la tiene AMLO: "Me había propuesto dejar pasar el enésimo insulto, la enésima calumnia de López Obrador, que el jueves afirmó, así porque sí, que yo le hago funciones de ‘achichincle' a la ‘mafia'. Befa ganada por criticar su miserable teatro de Iztapalapa, por cuestionarlo a él y a su pueblo bueno".
Desde luego, aunque lo niegue, para muchas personas Ciro Gómez Leyva es un achichincle de la mafia política. Si no lo fuera, no calumniaría cada estrategia de resistencia propuesta por AMLO: "Miserable teatro de Iztapalapa".
Después de afirmar eso, Ciro Gómez anuncia que va a combatir a López Obrador. ¿Más todavía? El columnista de Milenio dice: "¿Por qué un político profesional que se financia con recursos públicos puede calumniar con esa levedad a un periodista y salir impune?".
fuente- SDP noticias
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