LA REDACCIóN
México, D.F., 28 de junio (apro).- En menos de 24 horas, el Ejército hondureño detuvo y envió al presidente Manuel Zelaya al extranjero y el Congreso de ese país nombró a Roberto Micheletti como mandatario provisional, este tomó protesta y prometió que habrá elecciones el 29 de noviembre próximo.
México, D.F., 28 de junio (apro).- En menos de 24 horas, el Ejército hondureño detuvo y envió al presidente Manuel Zelaya al extranjero y el Congreso de ese país nombró a Roberto Micheletti como mandatario provisional, este tomó protesta y prometió que habrá elecciones el 29 de noviembre próximo.
Como primera medida, Micheletti anunció que este domingo a las 21 horas empezará un oque de queda por 48 horas.En tanto, crecen las protestas a nivel internacional por el golpe de Estado.
La Organización de las Naciones Unidas (ON) repudió el derrocamiento de Zelaya, lo mismo que el gobierno de Estados Unidos, que dijo que al único presidente que reconoce es al depuesto por el Ejército. A su vez, el Grupo de Río, del que forma parte México, condenó el derrocamiento de Zelaya, mientras que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, amenazó con derrocar a Micheletti.
Por la madrugada, un grupo de militares irrumpió en el domicilio particular de Zelaya y bajo amenazas lo subió a un avión y lo trasladó a Costa Rica.
Posteriormente, el Congreso hondureño leyó una carta de renuncia presuntamente enviada por el presidente quien desde su exilio negó que hubiese sido el autor de ese texto.
Sin embargo, el Congreso siguió adelante, separó oficialmente del cargo a Zelaya y nombró en su lugar al que era líder de ese cuerpo legislativo, Roberto Micheletti.
Momentos, despés, el empesario tomó protesta como presidente interino y practicamente convocó a nuevas elecciones para el 29 de noviembre.
La revuelta dirigida por militares y el empresariado hondureño se fraguó a partir de que Manuel Zelaya pretendía promover reformas constitucionales que le permitieran buscar la reelección.
Zelaya, identificado como un político de izquierda y uno de los mandatarios más cercanos a su homólogo venezolano Hugo Chávez, llamó a sus seguidores a no pemitir el golpe de Estado.Micheletti, empresario del transporte, era diputado por el oficialista Partido Liberal.
fuente- proceso
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