miércoles, 21 de abril de 2010

El congreso del estado lavó la cara a Ulises Ruíz


No fue necesario utilizar Cloralex, Pinol, Axión, Drano, Jabón Perla, Fabuloso o Flash.

Para lavarle la cara a Ulises, la mayoría priista, simplemente se limitó a levantar el dedo.

Fue un día de campo en San Raymundo Jalpan. El oficialismo, todo, confió plenamente en el trabajo del jurídico de la cámara y del primo incómodo, Marco Tulio Ruiz, quien con prepo-tencia se mostraba para quienes lo quisieran ver.

Junto a Keiko (así conocen al primo incómodo) estaba un güerito simpático que, poco a poco, aprende el arte de engañar. Es un junior, de nombre José Luis Bustamante, el encargado de Punta Colorada y además es hijo de un señor que se dice honorable y decente. Bueno, eso dice.
Keiko y el junior, una y otra vez, rien... constantemente festinan los "logros" obtenidos por el chofer-Herminio. Y también se burlan, se jactan del poder que hoy ostentan.

Ante la mirada de estos dos responsables de que se entregaran bien las cuentas del congreso, en el caso espefico de la exoneración, transcurrió una sesión extraordinaria que solamente agradó al priismo y, obvio, la que paga.
Previo al inicio de la sesión, Rogelio Sánchez Cruz, ese de Tlaxiaco, se acercó al "pinto" (Marco Tulio) y, discretamente le entregó una tarjeta que, inmediatamente, leyó el primo incómodo.

Ante todos estos movimientos y acercamientos hacia Keiko, El Pinto o Marco Tulio, todo indicaba que el primo incómodo fungía como presidente del congreso local o como responsable de la mesa directiva. Muchos legisladores priistas, una y otra vez, le rendían pleistecía. Mientras, el sonreía y, también se reía de lo
que atestiguaba.

El grado de sometimiento a El Pinto, fue tal que Patricio Domingo Sierra, encargado del Jurídico del congreso, como siervo, le entregó de mano al primo un directorio para que supiera, bien a bien, quienes eran los de la oposición. Así, al aprobarse con la aplanadora la modificación de la Ley de Notarías, Patricio corrió y casi besa en la mejilla izquierda a Keiko... fue la primer oreja de la tarde, como en la fiesta brava.

Apurado, El Pinto, hablaba y se mensajeaba a través de su Blackberry última generación. Por este medio le informaba a quien se conoce comunmente como el Don. Todo transcurrió como lo planeó el "delincuente electoral" (Ulises Ruiz), calificado así por el legislador Benjamín Robles Montoya.

En esta sesión extraordinaria, no había por qué alarmarse, porque pareció que "plancharon" y bien a Perla Worlich y otros diputados del Partido Acción Nacional que extrañamente no asistieron al salón de planos del pasado viernes 16 de abril.
De los perredistas, Jesús Romero, faltó. A Wilfredo Vásquez López, no se le escuchó. Con ello quedó demostrado que los "tintoreros" de la empresa llamada Partido Revolucionario Institucional, trabajaron bien y quemaron algunos cartuchos de lo que estaba programado para las campañas electorales.

De esta forma, oficialmente, afloraron las complicidades. Se observó la manera en que se promueva la impunidad desde el po-der y se confirmó que no todos los honorables son diputados ni todos los diputados son honorables o, lo que es lo mismo, entre primos hermanos las complicidades son más fuertes que
el parentesco.

Con el voto mayoritario de la fracción parlamentaria del PRI, el apoyo del Partido Nueva Alianza (Panal) y del Partido Social Demócrata (SPD), así como el voto a favor de la diputada perredista, Francisca Pineda Vera, el Congreso del Estado exoneró al ejecutivo estatal, Ulises Ruiz Ortiz, en el juicio de procedimiento ordenado en su contra por violaciones en materia electoral.

Tras una larga discusión, la aplanadora priista aprobó el dictamen elaborado por la Comisión Permanente de Vigilancia de la Auditoria Superior del Estado, en el que declara que no da lugar a determinar responsabilidad alguna al Gobernador del Estado Ulises Ruiz Ortiz.

Al manifestar su rechazo a lo que era una evidente exoneración al ejecutivo estatal, el coordinador de los diputados del PAN, Dagoberto Carreño Gopar, cuestionó la forma en que la Auditoría Superior del Estado (ASE) se adelantó a la elaboración del dictamen del juicio de pro-cedimiento, antes de que fuera notificada por los legisladores locales, lo cual quedó documentado en los documentos oficiales fechados por la misma ASE.

En tribuna, la legisladora perredista, Guadalupe Rodríguez Ortiz, deslindó a la bancada del PRD de la firma de su compañera de partido, Francisca Pineda Vera, quien en su calidad de integrante de la comisión de Vigilancia de la Auditoria Superior del Estado, con su rúbrica defendió al ejecutivo estatal y avaló la no sanción.

Al término de la sesión, Pinera Vera, de forma nerviosa evitó los cuestio-namientos de prensa haciendo a un lado la grabadora de ésta reportera, “Ahorita no voy a hacer ningún comentario”, dijo y huyó hacia su cubículo.
Trascendió que dicha diputada comentó que ella no había firmado el dictamen, pero no se deslindó públicamente.

La mayoría priista, apoyada por el diputado y presidente del Panal en Oaxaca, Cristóbal Carmona Morales y el diputado del Partido Social Demócrata (PSD), José Vázquez Morales, impusieron el criterio de la no retroactividad en las leyes.

Lo anterior en virtud de que la reforma electoral federal del pasado 13 de noviembre de 2007, entró en vigor 50 días después de que ya habían sido rotulados 100 vehículos de motor del Programa Unidades Móviles para el Desarrollo, en los cuales el Gobernador del Estado promocionaba su imagen.

Cabe destacar que el IFE y el Tribunal encontraron a Ruiz Ortiz responsable de violaciones a la constitución al usar recursos públicos con fines electorales durante la pasada elección federal del 5 de julio de 2009.

... Ahora resulta que en Oaxaca tenemos a un gobernador responsable y honesto.

fuente- el correo de oaxaca

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